Cada 29 de noviembre recordamos la importancia de proteger al yaguareté, nuestro felino más grande y uno de los símbolos más valiosos de la biodiversidad misionera. Su presencia es fundamental para el equilibrio de los ecosistemas.
En la actualidad, esta especie se encuentra en peligro crítico de extinción, principalmente por la caza furtiva y los atropellamientos en rutas. Su conservación depende del compromiso de todos: instituciones, comunidades y cada persona que habita o visita nuestra provincia.
En este día, renovamos el llamado a cuidar nuestros montes, respetar las áreas protegidas y adoptar prácticas responsables que permitan la supervivencia del yaguareté y de todas las especies que conviven en nuestros bosques. Cuidar al yaguareté es cuidar nuestra identidad natural.
